Mi misión de maquillar está dedicada a despertar la belleza interior de las mujeres, a menudo olvidadas en las comunidades de ancianos.
El día de las Madres en 2017, visité a la mía en su hogar de ancianos. Al llegar, me saludó con lo que se ha convertido en una declaración de cambio de vida:
«Oh Alida Me alegro de que estés aquí. Mira con lo que me visten, ¡no combina!»
Este es un claro ejemplo de que se puede emprender desde la Tercera Edad, incluso sin fines de lucro. Si gustan mayor información de Alida y el trabajo que hace, pueden visitar https://mymakeovermission.org/.
Carlos Miguel
#Entrecanos,